Evaluación de un proceso de bioestimulación aplicado a suelos áridos contaminados con hidrocarburos del petróleo
DOI:
https://doi.org/10.33414/ajea.5.730.2020Palabras clave:
biorremediación, bioestimulación, suelos contaminados, hidrocarburos del petróleoResumen
La biorremediación ha demostrado ser una técnica eficaz para la recuperación de suelos contaminados con hidrocarburos, especialmente porque no genera otros residuos que requieran ser tratados, además de ser un proceso económicamente viable y amigable con el medio ambiente. Es sabido que el mejoramiento de las
condiciones ambientales y nutricionales de la microflora autóctona de los suelos puede incrementar significativamente los procesos de biodegradación lo cual puede lograrse modificando la humedad y la disponibilidad de nutrientes (N, P y O2 fundamentalmente) en suelos pobres, es decir, aplicando una técnica de bioestimulación. El objetivo de este trabajo fue evaluar la capacidad biodegradadora de los microorganismos autóctonos presentes en un suelo de tipo árido contaminado con hidrocarburos del petróleo (HTP) de la zona de Catriel Oeste (cuenca neuquina), mediante una técnica de bioestimulación en microcosmos. Se utilizaron sistemas microcosmos conteniendo 200 g de suelo, los cuales fueron bioestimulados (BIO) ajustando la proporción de nutrientes (C:N:P 100:10:1). Por otra parte, se realizaron controles comunidad (CC) en microcosmos sin bioestimular. Ambos sistemas se incubaron a 25ºC manteniendo la humedad al 15% y se mezclaron periódicamente, cada 3 días, con el objeto de airear el suelo. Se tomaron muestras al inicio, a los 28 y a los 42 días, y se determinaron la concentración de HTP, actividad microbiana total (AMT), recuento de bacterias heterótrofas aerobias totales (BHAT) y bacterias degradadoras totales (BDT).
Ambos sistemas evaluados (CC y BIO) mostraron una reducción significativa del contenido de HTP (88%), la cual estaría relacionada con los incrementos observados en la AMT (4,3 y 3,7 veces para los sistemas CC y BIO, respectivamente), y con el aumento del número de BHAT y BDT (2 órdenes de magnitud en ambos sistemas).
Se puede concluir que la aireación del suelo parece ser un mecanismos simple y adecuado para la remoción de hidrocarburos en este suelo y que la aplicación de una técnica de bioestimulación no mejora la remoción del sistema donde solo se contempló la incorporación de aire a través del mezclado. Esto sugiere que es conveniente el desarrollo de un proceso que mejore las condiciones de aireación con el objeto de favorecer en mayor medida la biodegradación de los hidrocarburos del petróleo.